El presidente salvadoreño Nayib Bukele ha conseguido un logro sin precedentes al alcanzar la asombrosa cifra del 91% de aprobación ciudadana, posicionándose como el líder mejor valorado a nivel global.

Este impresionante respaldo popular, que supera con creces a cualquier otro mandatario en el mundo, refleja el contundente apoyo de los salvadoreños a sus polémicas, pero efectivas estrategias de seguridad y su estilo de gobierno «disruptivo».

La cifra récord, que ha sacudido el tablero político internacional, consolida a Bukele como un fenómeno político sin igual en la escena contemporánea.

Mientras sus detractores lo acusan de autoritario, las calles salvadoreñas respaldan masivamente su guerra contra las pandillas y la transformación radical del país, enviando un mensaje claro al mundo sobre la efectividad de sus métodos que han convertido a El Salvador de uno de los países más violentos a un ejemplo de seguridad pública.